Hay muchas teorías y mitos a la hora de hidratar y cuidar de manera correcta las flores. En FLOWER LAB hemos experimentado a lo largo de los años con varios métodos y aquí te comentamos los que hemos encontrado más efectivos.
Antes que nada debes saber que independientemente del método de hidratación que elijas, hay varios pasos que SIEMPRE debes de seguir después de que recibas o compras flores si es que deseas que duren más tiempo.
Una vez que tengas un paquete de flores en tus manos, debes comenzar por eliminar cualquier tipo de envoltorio plástico o de papel que las cubra.
Elimina las hojas de los tallos que vayan a estar en contacto con el agua ya que las hojas contribuyen a la pronta elaboración de bacteria (estas bacterias bloquean el flujo del agua hacia dentro de los tallos, lo que causa que tus flores se marchiten con mayor rapidez).
De inmediato, recorta entre uno y tres centímetros del tallo en forma diagonal con unas tijeras o un cuchillo. De preferencia asegúrate de recortarlas en una tina o bajo el chorro del agua, para evitar que burbujas de aire entren a los tallos y bloqueen el flujo de agua.
Si las flores que tienes en tus manos son rosas o mini rosas, utiliza un quita espinas para eliminar las hojas y las espinas, así evitarás pincharte. Puedes adquirir este artículo en nuestra tienda.
Si vas a colocar las flores en un jarrón viejo, lávalo a profundidad porque “los remanentes de tu anterior ramo de flores seguramente han dejado muchas bacterias y ya explicamos previamente lo que éstas hacen con tus flores.
Añade agua fresca a tu base (no es necesario llenar el recipiente hasta arriba, con tan solo un cuarto es suficiente).
Según nuestra experiencia, el agua fresca de la llave es la mejor alternativa para su cuidado e hidratación, aunque hay otros dos métodos que también funcionan:
Fórmula floral: agrega a tu recipiente con agua un sobre de FLOWER FOOD (vitaminas) y un sobre de EZ DOSE (antibacterial) por cada litro de agua (estos productos los puedes encontrar en la página de OASIS).
Fórmula casera (seguro has oido hablar de ella por tu Mamá o Abuela): agrega a tu recipiente con agua dos aspirinas (vitaminas) y una tapita de cloro o de vodka (antibacterial) por cada litro de agua.
Independientemente de la fórmula que decidas usar, lo más importante para que tus flores duren más tiempo, es el hecho de cambiar el agua lo más seguido posible, si puedes hacerlo diario aún mejor y si cada vez que cambies el agua vuelves a dar un mini corte en diagonal a los tallos, tus flores lo van a agradecer y tu disfrutarás más tiempo de ellas.
Comments